Aprende a limpiar gafas correctamente para que no se arañen
Cómo limpiar las gafas correctamente es una pregunta frecuente y que no siempre encuentra las respuestas adecuadas.
Tanto los usuarios de gafas graduadas como de los de gafas de sol, gafas de seguridad o gafas deportivas, sabemos bien lo importante que es mantenerlas limpias para sentirnos cómodos. Unas gafas sucias no solo dificultan la visión, sino que pueden provocarnos sensaciones desagradables como mareo o inestabilidad, además de arruinar nuestra imagen corporal.
Unido a estos factores, al tratarse de un artículo en contacto directo con la piel de nuestra cara y cerca de las vías aéreas (nariz y boca), su correcta higiene evitará la proliferación de virus y bacterias, estas últimas a menudo causantes de molestos granitos o irritaciones cutáneas.
De este modo, las gafas deben incluirse en nuestra rutina de higiene y protección contra el coronavirus, al tratarse de un artículo de uso personal que solemos tocar con nuestras manos con frecuencia.
Otro de los problemas habituales al limpiar las gafas es que, si no se hace adecuadamente, los cristales pueden rayarse o dañarse, dificultando la visión y frustrándonos mucho, sobre todo si hemos invertido en unas bonitas lentes de calidad.
¿Sabes cómo debemos limpiar las gafas correctamente? ¿Cada cuánto tiempo las limpias?
Cómo debes limpiar las gafas
La mayoría de las gafas actuales son muy ligeras y cómodas de llevar. Esto se debe a que están fabricadas con materiales orgánicos, lo que las hace también algo delicadas.
Tradicionalmente, una de las formas más comunes que se ha recomendado para limpiar las gafas, es ponerlas debajo del chorro del agua del grifo, a baja presión y tibia, utilizando un jabón neutro.
No se trata en sí de un mal método, pero hay que tener mucho cuidado al secarlas, utilizando papel o paños de microfibra, ya que de otro modo podrían arañarse. Además, los tornillos y partes metálicas tienden a oxidarse si mojamos las gafas con mucha frecuencia, por lo que recomendamos utilizar este método solo cuando las gafas estén muy sucias, como por ejemplo, porque se hayan caído en la tierra o arena.
Por otra parte una pequeña bayeta de microfibra o gamuza, como las que suelen venir en los estuches de las gafas, suele ser de gran ayuda cuando nos encontramos ante el dilema de cómo limpiar los cristales de las gafas en momentos de urgencia, si bien es verdad que, si las gafas están muy sucias o los cristales presentan grasa facial o cosmética, podrían emborronarse y ponerse peor.
Recuerda que la gamuza debe estar limpia (puedes meterla en la lavadora), algo que casi todos los usuarios de gafas olvidamos. Limpiar tus gafas con una bayeta sucia solo logrará extender la suciedad.
Cómo sujetar las gafas durante la limpieza
No es extraño oír que a alguien se le han roto o doblado las gafas al limpiarlas, y esto suele ocurrir porque no se sujetan de la forma correcta.
Para una adecuada higiene, debes sujetar las gafas por el aro, siempre por la parte de la montura de la zona o lente que estás limpiando, y nunca por la opuesta.
Si lo haces de este modo evitarás que tus gafas se rompan por el puente o que se rompa el cristal, y podrás limpiarlas con mayor seguridad.
Qué productos usar
Uno de los métodos más efectivos, y que desde aquí recomendamos, es el uso de aerosoles o sprays para limpiar lentes, siempre con ayuda de papel o de la gamuza.
Estos productos, que son muy económicos, limpian e incluso desinfectan y mantienen los cristales impolutos durante más tiempo. Algunos de ellos, además, contienen ingredientes que evitan que tus cristales se empañen.
Otra presentación de estos limpiadores, como es el caso del Limpiador de Gafas Veplus, es la de incluir una esponja en el extremo para ayudar a eliminar la grasa, manchas y/o residuos. También resultan muy agradables los limpiadores perfumados.
Una alternativa muy similar, e idónea para los que están mucho tiempo en la calle, son las toallitas limpiadoras como las de Protec Farma, que contienen ingredientes equivalentes a los de los sprays, con la diferencia de que son productos de un solo uso, simplificando así la limpieza y su transporte.
Si bien hay que reconocer que el uso de toallitas es menos ecológico, lo cierto es que son mucho más cómodas para poder utilizar en cualquier lugar o momento y llevarlas en el bolso o bolsillo, resultando muy recomendables en estos momentos en que extremar la higiene es crucial para la salud de todos.
Pero, si de verdad la limpieza de tus gafas te supone un quebradero de cabeza, o tu actividad particular implica altos niveles de suciedad en tus lentes, lo mejor es optar por el uso de un limpiador ultrasónico, con el que se logra una limpieza rápida y eficaz a través de la agitación de partículas de una solución con energía de sonido. Esta opción es, en muchas ocasiones, la elegida para gafas deportivas o de trabajo.
Cómo limpiar las monturas
Un consejo importante en tiempos de COVID-19 es que, cuando lo consideres necesario, puedes desinfectar la montura entera con alcohol del 70%. De este modo minimizamos riesgos de contagio y te sentirás más protegido.
Qué debes evitar durante la limpieza de tus gafas
Al limpiar las gafas debemos evitar, ante todo, respuestas rápidas y a menudo casi instintivas, como limpiarlas con el reverso de la camiseta o humedecerlas con un poco de saliva. Limpiarlas de este modo es el camino más rápido para conseguir unas gafas rayadas y que sean además una fuente de infección.
Recuerda no utilizar nunca limpia cristales u otros limpiadores domésticos, ya que se trata de productos químicos que pueden alterar irreversiblemente los tratamientos de tus cristales, como el antirreflectante, por ejemplo.
El papel higiénico o las servilletas de papel en seco pueden arañar tus cristales, así que mejor evítalos en la medida de lo posible y úsalos solo con los productos apropiados.
Respecto al jabón, este debe ser siempre líquido y neutro, ya que muchas pastillas de jabón contienen emulgentes que van a empañar tus cristales.
En definitiva, para disfrutar de una visión perfecta y también presumir de nuestras gafas como un accesorio desde un punto de vista estético, su mantenimiento y limpieza son imprescindibles. Además, al mantenerlas limpias prolongamos su vida y haremos que una buena inversión merezca la pena. En cualquier caso, y ante la duda, lo mejor es consultar al equipo de profesionales de Lentes de Contacto 365. Ellos responderán encantados y te ayudarán a mantener tus gafas perfectas.